Panorama Católico

Declaración de Buenos Aires

Al cabo de las tres jornadas de exposiciones foros e intensa actividad de intercambio entre movimientos provida de distintos países, en particular del Cono Sur, el Congreso Internacional por la Vida y la Familia, -que tuvo lugar entre desde el 17, al 19 de Junio de 2005 en Buenos Aires, Argentina- se leyó la Declaración de Buenos Aires.

Al cabo de las tres jornadas de exposiciones foros e intensa actividad de intercambio entre movimientos provida de distintos países, en particular del Cono Sur, el Congreso Internacional por la Vida y la Familia, -que tuvo lugar entre desde el 17, al 19 de Junio de 2005 en Buenos Aires, Argentina- se leyó la Declaración de Buenos Aires. En ella, las organizaciones participantes dieron a conocer sus conclusiones sobre los problemas más acuciantes las afectan, y que requieren una inmediata atención del Estado en ciertos aspectos y al mismo tiempo su prescindencia en otros.

Reunidos en Buenos Aires, del 17 al 19 de junio de 2005, representantes de movimientos, grupos y asociaciones de Argentina, Brasil, Chile, Estados Unidos, Francia, Paraguay, Perú y Uruguay, que promueven la defensa de la vida humana y la familia declaramos que:

COMPROBAMOS

-Que el relativismo ético y moral y el positivismo jurídico subvierten el sentido y la presencia de las verdades de orden natural, a través de leyes y proyectos inicuos sobre el control de natalidad… la legalización del aborto quirúrgico y del aborto farmacológico… la fecundación artificial y la destrucción de embriones que ésta lleva consigo… la esterilización quirúrgica… la eutanasia… la desaparición del concepto de patria potestad, sobre todo en lo que se refiere a la sexualidad de los menores, y otras iniciativas que violan la dignidad de la persona humana y de la familia…

-Que el orden natural también es avasallado por presiones ideológicas y políticas que pretenden legalizar «modelos» aberrantes y antinaturales de familia…

-Que esta cultura de la muerte se promueve activamente desde el Estado, con una inocultable intención de derogar las leyes que protegen efectivamente a la familia y la vida del ser humano desde su concepción hasta su muerte natural…

-Que la mentalidad economicista, oprime a la familia con la desocupación, los bajos salarios, las altas tasas de interés y también con desmedidas cargas tributarias que, entre otras cosas, coaccionan a la mujer para que abandone su misión de madre y educadora, para colaborar en el sostenimiento económico del hogar…

REAFIRMAMOS

-Que la vida humana es inviolable e inmanipulable. Toda persona merece respeto a su integridad física, psicológica, social y espiritual, y goza de derechos individuales a partir de que es concebida, hasta el momento de su muerte natural. Bajo ningún pretexto se deberá someter a la vida humana a manipulación, experimentación, comercialización, violencia o destrucción.

-Que la familia es una institución natural, anterior al Estado, núcleo central de la sociedad civil, comunidad natural de vida fundada sobre el matrimonio, que debe ser respetada y protegida por el Estado.

-Que la familia es el ámbito natural de la generación de la vida humana, cada hijo representa una riqueza para la familia y para la sociedad… sin embargo, sea cual fuere el ámbito de su generación, cada niño no nacido, posee una dignidad irrepetible, que debe ser respetada, por lo que es injustamente discriminatorio calificarlo de &#8220…deseado&#8221… o &#8220…no-deseado&#8221….

-Que los padres tienen obligaciones y responsabilidades y por lo tanto derechos con respecto a sus hijos:

a) El derecho de transmitir su fe religiosa a sus hijos y formarlos de acuerdo a ella. Las familias tienen el derecho de creer, practicar y manifestar públicamente su religión.

b) Los padres como primeros responsables de la educación de los hijos, tienen derecho preferente a escoger su educación, según el orden natural y su fe religiosa, incluidos los temas relacionados con la sexualidad. El estado deberá proveer responsablemente la educación en forma subsidiaria, respetando los principios, las creencias y los valores de la familia.

c) La familia, independientemente de su realidad socioeconómica, deberá contar con asistencia médica durante todas las etapas de la vida. Esta asistencia deberá respetar la voluntad de los esposos en cuanto al número y al espaciamiento de los hijos, sin coacción directa o indirecta de ningún tipo. Así mismo, no sólo las escuelas, sino también quienes ejecuten las políticas de salud pública, deberán contar con el consentimiento explícito de los padres para tratar temas de salud con los menores, también en materia de sexualidad. La llamada &#8220…confidencialidad&#8221… aplicada a los menores es un gravísimo e irresponsable abuso de las autoridades…

-Que por ello exigimos que quienes ocupen cargos de responsabilidad política, ejerzan sus funciones con coherencia con los principios fundamentales del orden natural y de su fe.

-Que hemos decidido esclarecer en la opinión pública los temas prioritarios en la elección de autoridades: el respeto a la persona humana desde la concepción hasta su muerte natural, el respeto a la familia, el respecto a los derechos de los padres… las políticas de salud y las políticas de educación, entre otros temas que se relacionan primariamente con el orden natural.

-Que por todo ello:

NOS COMPROMETEMOS:

A incrementar la impugnación pública y formal de los planes y políticas elaboradas allende nuestras fronteras, con la finalidad de edificar un orden social injusto y funcional a intereses que sólo buscan imponer como método la sustitución de la fe y la demolición de los valores que dieron origen a nuestras Patrias.

A defender cada vida -cualquiera sea su tiempo de existencia- y el derecho a vivirla con la mayor dignidad posible, aunque ello confronte con los designios de quienes sólo pretenden de nuestras naciones espacios de reserva, con el menor número de habitantes posible, con el único y excluyente objetivo de servir a un ordenamiento moral basado en el egoísmo, el lucro y el saqueo sistematizado.

POR TODO ELLO, DESDE BUENOS AIRES:

Venimos a convocar a todos los hombres y mujeres de buena voluntad a redoblar los esfuerzos, a no desfallecer, hasta globalizar la Cultura de la Vida y sepultar, de modo definitivo, la cultura de la muerte que se nos quiere imponer disfrazada con el rótulo de derecho.

Dado en la ciudad de Buenos Aires, capital de la República Argentina, a los 19 días del mes de Junio de 2005

Volver a la Portada

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *